La pesca de tenya puede hacerse desde un banco o una estructura de roca. Sin embargo, el método es mucho más difícil cuando se practica desde un barco a la deriva.
Los pescadores son aficionados a esta técnica para capturar espáridos como la dorada. También es una forma estupenda de capturar otras especies, como el escualo y la lubina. La pesca con tenya es un método ancestral de pesca vertical que procede de Japón. La tenya es un señuelo compuesto por una cabeza de plomo y un segundo anzuelo. Esta última está unida a la primera en nylon por razones de sigilo. El dispositivo se utiliza principalmente con un cebo pequeño, como una gamba. También puede utilizarse con un señuelo, lo que la convierte en una técnica de pesca en barcomuy versátil.
Lanzamiento y rebote para la pesca de tenya en barco
La pesca de la tenya se practica principalmente en un barco, ya que también es una técnica de deriva. Este método te permite cubrir una gran distancia dejando que la embarcación vaya a la deriva. En este caso, el sedal se lanza en dirección contraria a la corriente marina. Luego se hace rebotar la tenya en el fondo del agua para atraer la atención de los peces. El método de rebote se utiliza mejor desde la parte delantera o trasera del barco. Cuando la tenya pasa por debajo de la embarcación, puedes cambiar fácilmente de lado.
Dejando la tenya a la deriva
Dejar la tenya a la deriva es una técnica versátil. Se puede utilizar tanto si el barco está anclado como a la deriva. En general, el método consiste en dejar que la corriente lleve el cebo hacia abajo. Cuando estés anclado, simplemente pesca en dirección a la corriente y suelta la tenya. La corriente llevará el cebo más lejos una vez que llegue al fondo. El sedal se suelta de vez en cuando para que el cebo quede justo por encima del fondo. Al derivar, se utiliza el mismo procedimiento, salvo que se presta más atención al relieve del fondo. El fondo puede cambiar rápidamente debido al cambio de posición.
La gran caída
Esta práctica de pesca de la ten ya puede resultar muy eficaz en sesiones difíciles, ya que consiste en lanzar el sedal y mantener la tenya entre cuatro y seis metros del fondo. La punta del sedal se deja caer al fondo. Al hacerlo, la tenya remueve mucha grava y arena, que pueden atraer a los peces. La acción también desplaza a los corales y a organismos como los gusanos. Otra razón para elegir esta opción es que, si la embarcación va a la deriva, se puede llegar a zonas de captura como manchas de coral, cuevas y grietas naturales de las rocas.El método es menos eficaz con una embarcación fondeada.Uno se queda en la misma zona a menos que se mueva alrededor del barco. Para maximizar la eficacia de la práctica durante la deriva, se deben realizar hasta cinco grandes descensos.